En el marco de las elecciones más grandes de México, donde se renovarán más de 20,000 cargos de elección popular (incluidos la Presidencia de la República, el Senado y la Cámara de Diputados). 

Escuela de Datos recibe en su sección de experiencias a Data Cívica, una organización feminista que utiliza datos y tecnología como herramientas para la defensa de derechos humanos.

Conversamos con su coordinadora de datos, Alicia Franco, quien nos compartió la experiencia de Votar Entre Balas. Este es un proyecto insignia cocreado desde 2018 con Animal Político y México Evalúa, que estudia cómo impacta el crimen organizado en el espacio político electoral mexicano desde diferentes aristas (uso indebido de recursos públicos, impunidad, redes de seguridad, entre otros).

¿Cómo arranca el trabajo datero de Votar Entre Balas?

 

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Para Alicia, “este proyecto […] se da en el marco de una colaboración cercana entre sociedad civil y academia […] [donde] vimos una falta de sistematización sobre ataques que podríamos vincular a la delincuencia organizada, a funcionarios públicos, personas candidatas, personajes políticos o agentes políticos relevantes”.

Así, Votar Entre Balas tenía una meta: ofrecer una metodología clara, transparente, replicable y de manera gratuita con un carácter metaperiodístico (reflexión y análisis crítico de las noticias y sus fuentes de información) para entender a través de datos abiertos, la dimensión de la actividad criminal en contextos políticos y así incentivar la colaboración con las autoridades en la toma de decisiones frente a escenarios adversos de violencia político electoral en México.

Tras asumir esos retos, comenzaron a profundizar en la problemática desde 2018; es decir, buscaron precisar qué querían contar con los datos que estaban a punto de recabar: agresiones a personas candidatas. Posteriormente, decidieron abarcar un período de estudio más amplio que comprende todo un ciclo electoral (antes, durante y después de una votación).

«Esto se justifica desde que empezamos a ver que, antes, la violencia tenía un pico muy fuerte: subía y bajaba durante las elecciones. Ahora, sube y se mantiene […] Sí, baja poquito, pero mantiene niveles mayores a los previos a esas elecciones. Eso lo empezamos a ver desde el año pasado y decidimos ampliar [el estudio del fenómeno]”.

— Alicia Franco, coordinadora de datos de Data Cívica

 

 

El reto de iterar el trabajo de datos sensibles

Votar Entre Balas ha tenido diversas etapas de iteración y evolución en el tiempo. Pese a eso, la metodología implica una sistematización de ataques electorales a escala nacional, federal y municipal como pilar fundamental del proyecto.

 

 

Frente a eso, Votar Entre Balas tuvo un segundo proceso de iteración metodológica. Ahora, recopila y analiza noticias a través de la plataforma Google News. Al utilizar librerías especializadas en lenguaje de programación, se realiza una extracción periódica de hechos noticiosos. Posteriormente, se verifican manualmente casos de violencia política electoral, donde se identifican y extraen variables para públicos de interés, como periodistas, personas defensoras de derechos humanos, tomadoras de decisión, entre otros.

Para Alicia, esta segunda iteración metodológica: “sí requiere una revisión de las notas bastante detallada, donde tenemos unos criterios particulares […] no incluimos en la metodología ningún evento del que no tengamos la evidencia que estuvo vinculado a algún grupo criminal, ya sea por alguna característica o por vinculación explícita con el agresor”.

A lo largo del tiempo, ambos procesos metodológicos han logrado presentar dos hallazgos relevantes en las diferentes coyunturas electorales sistematizadas por Votar Entre Balas:

  • 71 % de los eventos registrados se presentan a escala municipal, dado que existen más cargos en contienda en contraste con las elecciones a nivel federal y estatal
  • Las alternancias partidistas (transicionar de una administración de un partido político a otro) a escala municipal son las que más detonan la violencia poselectoral

Para trabajar estos hallazgos, Votar Entre Balas sortea la complejidad y sensibilidad de los escenarios de violencia político electoral mexicanos. Por esa razón, han adoptado un enfoque ético de la información. Detrás de cada uno de los datos que levantan, hay una historia que amerita ser contada, visibilizada y tratada con el cuidado que se requiere; especialmente, en medio de la polarización presente en las coyunturas electorales latinoamericanas.

De una base de datos a una diversidad de productos sistematizados en evidencia para entender la violencia político criminal en México

https://twitter.com/datacivica/status/1783156580902461591

El corazón del proyecto está en su base de datos. Mes a mes, esta se actualiza y verifica con variables clave, como la fecha, el titular de la noticia, las víctimas de los ataques, tipología del ataque registrado, observaciones particulares del fenómeno, entre otros. Muestra de eso son las gráficas donde han logrado visibilizar el paulatino, pero contundente aumento de ataques a autoridades y candidates de elección popular, así como personas afines a sus círculos profesionales y laborales, como familiares y funcionarios.

 

 

En términos de comunicación e incidencia, Alicia cataloga como fundamental hacerse estas preguntas al momento de reflexionar a quién le debería competir el uso de estos datos:

  • ¿Quién debería tener esta información?
  • ¿A quién deseo dirigirme con estos datos?
  • ¿Qué quiero decir de estos datos al público?
  • ¿Qué conversaciones deseo generar?

Por esa razón, Votar Entre Balas ha tenido diferentes salidas de comunicación e incidencia hacia diferentes públicos: una herramienta en línea, policy briefs, talleres de alfabetización y sensibilización de los datos trabajados, así como un boletín mensual.

Sobre la herramienta, Alicia la describe como “interactiva para que juegues con los datos […] [la] desarrollamos desde R con Shiny, que te permite hacer cruces, sacar información particular, usar filtros particulares, donde no tienes que aprender a programar para poder utilizarla. Al no ser una base tan grande, se puede usar con Excel y Datawrapper”.

Para articular el uso de esta herramienta, realizan talleres y cursos de alfabetización en su utilización, dirigidos a periodistas y personas defensoras de derechos humanos. Así, se obtiene un ganar-ganar datero: los datos se abren y se utilizan para reportes de diversa índole mientras Data Cívica identifica oportunidades para mejorar la utilidad de la herramienta en el terreno.

Sobre los policy briefs, Votar Entre Balas busca incidir en la generación de políticas públicas con autoridades locales, dado que el aumento  en los eventos de violencia criminal electoral no se presenta al mismo nivel en todo el país. Muestra de eso son los hallazgos de su último policy brief, donde tres de las ocho regiones presentan un aumento claro y pronunciado, correspondiente al centro norte (Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro y San Luis Potosí), noroeste (Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Sinaloa y Sonora) y oeste (Colima, Jalisco, Michoacán y Nayarit) en contraste con un aumento modesto de los eventos en el centro sur (Ciudad de México, Estado de México y Morelos) y sureste del país (Quintana Roo, Tabasco, Yucatán y Campeche).

 

 

Para lograr incidir a escala territorial, Alicia aseguró que están en labores de acercamiento con entidades para hacer procesos de sensibilización, donde se pueda “presentar la información, su utilidad, cruzar con la disponibilidad de herramientas que tenemos a nuestra disposición o tienen ellas a su disposición para hacer frente al problema”.

Finalmente, todos estos datos aterrizan en un boletín mensual que, de manera automatizada, realiza un resumen de los cortes mes a mes de los hechos trabajados por la base de datos. Sumado a eso, combina una sección no automatizada, donde la equipa de Data Cívica analiza algún tema en particular de los datos trabajados, el cual varía periódicamente según se vaya moviendo la coyuntura electoral mexicana.

¿Hacia dónde apunta Votar Entre Balas?

A futuro, Votar Entre Balas aspira seguir generando el interés que ha tenido, producto de la coyuntura electoral en México. A partir de su trabajo de datos, donde facilitan información actualizada y accesible sobre la problemática de la violencia política electoral en el país, también buscan seguir fortaleciendo su vínculo con medios de comunicación y periodistas, pues, como asegura Alicia, “nosotras contamos notas, pero nosotras también las generamos, pues propiciamos la conversación alrededor del tema”.

Desde lo local, Data Cívica también espera tener una mayor colaboración con las autoridades y así articular una estrategia de incidencia en términos de seguridad con causas interseccionales al proyecto, como el control de armas. Para eso, se encuentran ideando una estrategia de articulación e incidencia en territorio para poder llevarlo a cabo.

Así, Votar Entre Balas se ha convertido en una herramienta de referencia en uso y apertura de datos político electoral para la generación de reportes periodísticos e insumos de interés para la generación de políticas públicas en México. Al sensibilizar a la sociedad mexicana sobre las implicaciones y consecuencias de la violencia político-electoral, continúa emprendiendo procesos metodológicos y tecnológicos para mejorar la accesibilidad y utilidad de sus datos y así transformarlos en acciones para mitigar la injerencia del crimen organizado en el espacio político que atañe al país en coyunturas electorales puntuales.

¿Te gustaría conocer más sobre Votar Entre Balas?

Para más detalles sobre Votar Entre Balas, síguele la pista a su plataforma interactiva de consulta y sigue a Data Cívica en Twitter e Instagram para que puedas estar al tanto de las novedades que publican en materia de violencia política electoral con análisis y visualizaciones en el uso de datos en México.